20 diciembre 2005

Vacía estadística

Tantas veces anuncian
este ben(mal)dito aguacero
como cuando nos prometemos
y al universo se le antoja cenar
un eclipse de asfalto y silencio

Tantas veces no sé prevenir
cuando estás por alojarte
en la distancia desesperación
y no tengo forma de sacarte
estrella guía y zozobra

Tantas veces cuando se apaga
el ida y vuelta noctámbulo
y ninguno de los dos dormirá
como si fuéramos a compartir
sólo unas migajas de sabores
en bordes distintos

Tantas veces se parecen
a cuando el pronóstico falla
que verte la próxima no vez
es todo lo que espero
como estimulante a la ceguera
como variable vacía
que nunca va a aparecer

19 diciembre 2005

Compartiendo la nada

Si no fuera por vos

abismo seco y mudo
de transparencia asfixiante
realidad de ventanilla
que no cambia su rutina

si no fuera por tu voz

eco murmullo de sonrisa
como vallas y defensa sutil
durazno recuerdo cálido
que no deja destruirme
bajo otras frías manos

si no fuera por que no

puertas de ayer etéreas
sucumbiendo en hebras
arena de un tiempo inasible
que sólo vuelve pretérito

si no fuera porque es

profunda desesperación
anudada a la angustia
de saberte perfecta insomne
gota rociada madrugada
que no llego a detener
cuando cae y muere

16 diciembre 2005

Viernes de tu ausencia

Cuesta creer en los viernes
Los leones de nafta se callan
y duermen todo su cansancio
en la noche de garage estacionada

En puntas de pies descalzos
los pasajeros se alejan
de esta ruina de asfalato
de este manantial de arena

Los ruidos llueven su esencia
y se escapan del destino
por las bocas de tormenta
y la sorda tierra reseca

Las luces bostezan sus ojos
consumen lo poco del silencio
que aun sobrevive a estas horas
como un destello mal borrado

Cuesta creer en los viernes
Todo es una gran mentira
y una verdad tan siniestra
que buscarte es sólo llenar

el cuerpo de tu ausencia

15 diciembre 2005

Mínima diferencia

Sin ir más lejos
sin ser más tenue
en las declaraciones
pero sin llamar tanto
tu atención indispensable

Sin ir más cerca
sin derrochar elogios
que hagan de tu rubor
un accesorio permanente
pero sin dejar a un lado
los indicios primarios
de una valoración subjetiva

Sin ir a alguna parte
sin dormirme demasiado
en los laureles del fracaso
pero sin bajar los sueños
que por milagro
o locura
vuelven a incluirte

01 diciembre 2005

Deteniéndome a tiempo

Llueve como si no quisiera
en lenta cámara temporal
cada gota y su minuto
no fluyen hacia la hora

Cómo calmar los demonios
sin llamarte
fingiendo sosiego en el habla
sin demostrarte
que siento perderme en la desesperada
noche de caídas almas

Llueve como si no supiera
qué hacer consigo misma
dejando la oscura vereda
rociada de lentitud

Cómo sesgar este martirio
y cubrir el abismo etéreo
sin llamarte
tragándome las sílabas
que no debo pronunciar
para sacarte de mi infierno

Llueve como si la indiferencia
se estrellara contra el suelo
y yo no supiera
qué hacer contra la humedad
brotando desde las raíces
como si no quisiera
alejarte en un instante
todas las lunas juntas
sin llamarte
para salvar el resto
de tu efímera presencia

18 noviembre 2005

Mientras despierto

Sólo mientras el insomnio
abra de par en par
sus oscuras ventanas de petróleo
en la taza de café

y te piense sin razón
más de lo debido
quizás porque sigo a tu nombre
recaudando palabras en el viento

Sólo mientras el insomnio
traiga de la cosecha recuerdo
ese tu racimo sonrisa
de tan suabe dulzura
que llena la copa para
saciar por entero la calma

y seas lejano paraíso
entre las supuestas contradictorias
horas nuestras a contramano
como una helada lluvia
en medio del sol verano

Sólo mientras el insomnio
sea un mínimo
punto de reencuentro
y tu voz me siga llevando
como finalmente sucede
a las puertas del entresueño

09 noviembre 2005

Despedida

Vulnerable
una hoja temblando al viento
a punto de desprenderse
la gran noche me mira desde
todas partes
y no dejo de mirarla inmóvil
los pocos lazos con los que la tierra
pretende atarme
ella puede deshacerlos
en un abrir y cerrar de su antojo
Indefenso
buscarte es perseguir una sombra
para abrigarme el desamparo
el frío ya no es una opción
si vas a permitir que me atragante
con los monosílabos de mí
Desprotegido
en un bosque echado a mis suertes
que escasamente sirven para sembrar
las parcelas de la desesperanza
Deshabitado
como estar aquí rindiéndome
en la cruz de tu silencio
un hombre perdido
ya sin vos

Una de dos

En el mejor de los casos
ud. me colgará de cabeza
o del cuello de las extremidades varias
o de los latidos sin más preámbulos
me ahorcará sin atenuantes
hasta las ganas de mirarla dearribabajo
hasta la pasión por recordarla
justo como ud. no es
me asfixiará los encuentros
los pospuestos los inexistentes
para que suelte todo el aire
y sobreviva yo como pueda
me presionará las respiraciones
hasta amoratarme de azul ni frío
sino de oscuro olvido
me adornará con esas guirnaldas
hechas por flores silvestres
del tipo “ nomemolestes ”
me hará tragar todas las palabras

Y en el peor de los casos
me dirás que sí

02 noviembre 2005

Si fuera ahora pero

Pero si fuera tu última respuesta
el último milagro dispensado
para que mi ansiedad
no camine sola sin saber
Pero si fuese tu última intención
tu postrera forma de lanzar
al azar las suertes predestinadas
señalándome otro sendero
Pero si fuera tu última razón
la última y definitiva explicación
para este administrador austero
que enmudece por última vez
ante la oscuridad inevitable
Pero si así fuese
cómo aceptarlo sin resistencia
cómo permitiría inmovilizarme
cómo no dejaría de luchar
hasta las últimas fuerzas

Como ciego

Como se construye día a día
subiendo invisibles peldaños
pero no teniendo las certezas
de nada

Como se camina la soga débil
sin redes que nos esperen
cuando cometamos el error último
el fatal

Como se navega por el sideral
espacio negro vacío silencioso
y nadie nos garantiza el deseado
regreso

Como se sumerge en el oceánico
mar de asfalto y luces tricolores
sin saber qué suerte amarga
nos aplastará

más o menos de este modo
aullándole como lobo ciego
al invisible plenilunio
de vos

Ni así

Ni en las peores circunstancias
ni cuando destruyan este desquicio
en la búsqueda estúpida de
la paz de los cementerios
ni en esos trágicos indeseables
que forman parte del juego
y tarde o temprano
nos sucede a todos
ni cuando te torturen las tormentas
y te quedes despierta dormida
deseando que pronto se esfume
en un abrir y cerrar de soles
ni en los momentos aciagos
donde ahogar al responsable
de tus vacaciones tempranas
fuera tan fácil y factible
ni cuando me cubras así todo
de enmohecible distancia
quizás porque no descubriste aún
qué hacer con mi insistencia
ni en los instantes insoportables
bajo la presión del mundo entero
diciéndote qué cosas deberías
ni cuando sientas que nadie
ha permanecido en pie a tu lado
ni lo pienses
no voy a hacerlono voy a abandonarte nunca

Subcero

Tiemblo de frío azul debajo de la apariencia
de silencio supuesto impuesto
de abrigarme la vista con la noctámbula
que crece y decae tan blanca
tirito de tu ausencia baldía presente
de coleccionar tus segundos
a la intemperie bajo cero
de pantallas bajo ceros y unos
y me congelo con este calor subterráneo
en medio de altos muros desnudos
que jamás cobijarán la buena noticia
de encontrarte a ciegas
y me frizo de tanta vacía imagen
que no reproduce la tuya
de tanta basura en los medios
intentando cubrir sin lograrlo
a los pétalos colores fragancias
y se amoratan las yemas y su tinta
de suspender el oxígeno
que sólo vos provees
y todas estas sombras pálidas y oscuras
que rodean acercándome lentas
van escarchando poco a poco el suelo
para servirme de último lecho

En común

Compartir la mullidez algodonera
de almohadones abrazados
en la penumbra de los que observan
la lluvia viva por la ventana
la marea de tibiezas por dentro

Compartir las letras en común
fotocopias para el alma
donde vos te impregnás sublime
y yo enmudezco entre palabras

Compartir las melodías suaves
del piano de Norah
aún no sabiendo que los dos
las escuchábamos cada uno
en su rincón preferido

Compartir la distancia equidistante
hasta anularla por completo
hasta que entre nosotros sólo haya
un único compartir de tiempo

Sumatoria

Necesitarte es la suma macabra
de las desesperaciones crujientes
de los bordes de abismos
de las inestables emociones
temblando el suelo agónico
sin poder reecontrarte
de las preguntas inútiles
que se le hacen a las tinieblas
sin recibir contestación
de no saber revivir las marchitas
fragancias del edén
de las horas que se pierden
convocándote a viva voz
con la garganta llena
y las mieles de tu nombre
de no tenerte
y de llevarte a todas partes
para que cambies mi suerte

XV Soneto para Romina

Esos no tan tuyos
que me respirás sobre el rostro
abofeteándome las ilusiones
dejando las marcas indelebles

Esos no tan negros y oscuros
como una postal sonora de tormentas
que vendrán a inundarme
de malos presagios y renuncias

Ese no tan particular y breve
enmarcado como para regalo
de una siniestra despedida

Ese no palpable sobre la piel
como una caricia desgarradora
mutilándome el optimismo

XIV Soneto para Romina

Un día más
náufrago entre la neblina asfáltica
a la deriva entre los tiburones de hormigón
y el famélico devenir de las horas

un sobreviviente de tu arusencia solo
nutriéndome de las secas raíces
que bajo la tierra quedaron
en forma de escasos recuerdos

solitario poblador renuente
a cortarse el aliento tenue
último incansable sin fuerzas

para cargar la noche sobre los hombros
para decir basta y
un día menos

Carente de sentido

Me falta la promesa de diluvio
borrando por completo el resto
de ese mundo que no sos vos
me falta de tu risa la sustancia
de tu intensidad el tiempo
de tu magia la luminosidad
me falta la suma improbable imposible
de las proyecciones en tu porvenir
incluyéndome aunque fuera casual
y no premeditada mi presencia
me falta los no sé qué irracionales
que necesitás para pensarme
y que sin duda te sobran holgadamente
para ser percibida por este ciego
me falta cualidades exteriores
e interiores que ni te cuento
todas esas cosas imprescindibles
para encender tu curiosidad
me falta poco para salir del letargo
y darme cuenta aunque no quiera
y comprender las obviedades
de tu olvido entre líneas

Persistente

Todavía está merodeando tu expresión
que luego se esparcirá homogénea
sobre el cielo de blanco de papel
donde ya sabés sos estrella
aún puedo si no respiro muy fuerte
encontrar la fragancia de tu flor intacta
que es casi un breve suspiro
exhalando por tus poros de brisa
incluso si llegara a dormirme aquí
en el maltransportador urbano
sabría que pronto estás por venir
a tomar parte y todo
de mi sueño enceguecido
y seguís construyéndote sin tregua
caminos que nadie ha transitado
porque basta con pensarte un segundo
en las parcelas de la nada
para que logrés reinventar el espacio
para renombrarme los silencios abundantes
y continuás hablándome la mañana
para los oídos de esponja
nunca podría cansarme del sonido
que se acumula como hojas
de los jardines de agua formado
por las gotas de tu interior condensado
se mantienen fluidos tus gestos
porque te retengo en las retinas
para que nada ni nadie logren
desterrarte de los anchos pasillos
que recorre esta obsesión creciente
se quedan tus incandescentes diurnas
a guiarme el resto de la jornada
cuando vos alimentás tus cerrados ojos
y tu perseguidor come las sobras
del insomnio insípido insalubre
insiste tu natural nocturnidad
para orientarme lo poco del descanso
cuando vos endulzás tu obligación
y tu escritor se muda la superficie
de las pieles del invierno intenso
y persiste su inestable movimiento
de sístoles y diástoles desequilibrados
para demostrarte que no hay imposibles
para esperar tu respuesta sin agonía
para sentir que sos la única que podría
arrancármelo si quiere

En diez minutos

Me quedan diez minutos
debo hamacar una espera de rutina
pero resta río suficiente
para contemplar tu recuerdo con
los ojos adormecidos de no verte
el aire que no guarda resquicios del tuyo
el tránsito que no me llevará
hacia donde marcás tus huellas
las veredas llenas de angustias y pozos
el sol que derrite mis sienes
y la paciencia que está escasa
y todavía me quedan cinco minutos
la fila de corbatas conformistas
no avanza ni un milímetro
ni sale de su letargo de oficina
la gente pasa sin que le pase nada
quizás porque se contagiaron
de este manicomio grisurbano
quizás porque mi locura pasa
por pensarte en estos momentos
(en cada esquina llena de artificiales
tu naturalidad me devuelve el aire)
y me queda un minuto
los mecanismos burocráticos comienzan
lentamente a mover sus engranajes
y vos ya no tenés la obligación
de auxiliarme a la distancia
con tus imágenes salvadoras
y la voz de los depósitos materiales
me llama displicente
y entonces debo esperar otra espera
la que vale la pena
hasta cuando desel presente